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Legionella y altas temperaturas: siempre vienen juntas

Legionella y altas temperaturas

¿Qué es exactamente la legionella?

La legionella es una bacteria que, como tantas otras, siente predilección por el agua. Se desarrolla en ríos y lagos, pero tiene mucha facilidad para pasar de ahí a nuestros sistemas de ventilación y refrigeración. Es decir, a todos esos sistemas que en verano, y cada vez más el resto del año, tanta demanda tienen. A medida que las temperaturas aumentan, año tras año, crece también nuestra necesidad de estar frescos e hidratados… y con ella, crecen también las oportunidades de la legionella para llegar a nuevos huéspedes

La legionella es una bacteria especialmente peligrosa porque prospera dentro de los organismos unicelulares. Cuando pasa de los sistemas de refrigeración con mal mantenimiento al interior de nuestros cuerpos, la bacteria llega a los pulmones. Allí es absorbida por las células inmunitarias que intentan combatirla… y se revela su principal peligro: dentro de una de esas células, la bacteria de la legionella no muere, sino que se alimenta hasta que finalmente la destruye. Y ahí comienza la infección que llamamos legionelosis.

La legionelosis no debe tomarse a la ligera. Es una enfermedad grave, que hasta puede llegar a resultar mortal. Es cierto que en los mejores casos, la bacteria de la legionella causa la llamada fiebre de Pontiac, una enfermedad leve con síntomas similares a la gripe. Pero nunca debemos confiarnos: el riesgo de legionelosis es real, y descuidar las condiciones higiénicas de las instalaciones en las que existe riesgo de legionella es poner en peligro la salud de muchas personas.

 

¿En qué condiciones prospera la legionella?

Con temperaturas altas, de entre 20 y 50ºC, la legionella puede multiplicarse con facilidad. Se desarrolla especialmente en entornos no tratados y sin desinfectar, de higienización y mantenimiento deficiente. Desde ahí, la legionella no se transmite por vía oral, sino mediante la inhalación de pequeñas gotas de agua en aerosol que contienen la bacteria.

Líneas arriba hemos mencionado algunos de los lugares en los que se siente cómoda la legionella, pero vale la pena ampliar la lista: la bacteria suele desarrollarse en torres de refrigeración, sistemas de aire acondicionado, sistemas de riego por aspersión, humidificadores de aire, jacuzzis, túneles de lavado… en definitiva, todos aquellos sitios en los que haya humedad, agua y algo que es cada día más sencillo de tener: altas temperaturas. La legionella es una enfermedad típica del verano, pero es cada vez más habitual que resista y medre durante un mayor número de meses.

 

¿Cómo enfrentarse a la legionella y reducir el riesgo de infecciones?

Dado que, como sabemos, la legionella se reproduce en entornos en los que exista agua, un tratamiento de aguas adecuado y contar con un plan específico para controlar y prevenir el surgimiento de la bacteria es imprescindible para los negocios que tengan esa característica. De hecho, el plan de control y prevención de legionella es obligatorio por ley, para todas las empresas de los sectores higiénico-sanitario, alimentario y hotelero.

Ante la llegada de las altas temperaturas, o simplemente si tenemos dudas sobre las condiciones en las que se encuentran nuestros sistemas de agua o refrigeración, lo más adecuado es contar con una empresa experta en prevención y erradicación de la legionella, con profesionales que dispongan de formación homologada como lo que trabajan en el equipo de Clyma. De esa manera, nos aseguraremos de que en nuestras instalaciones se controla la vía de entrada de la legionella y se neutralizan las condiciones ambientales que favorecen su reproducción.

 

Si quieres saber más acerca de la legionella o realizar un análisis completo de tus instalaciones para asegurarte de que están en las mejores condiciones posibles, no improvises ni pienses en dejarlo para mañana. Contacta con un equipo de profesionales formados para ofrecerte todas las garantías frente a la legionella. En pocas palabras: contacta con Clyma.

Llámanos al 94 415 10 22 o rellena nuestro formulario y hablaremos sin ningún tipo de compromiso.

 

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